Los Rockets cayeron con mucha claridad en casa de los 76ers, que jugaron sin Jimmy Butler pero pese a ello dominaron a los de Houston.
James Harden se quedó muy solo al mando de la nave de los Rockets en casa de los 76ers, en Filadelfia, donde cayeron por dieciocho puntos de diferencia: 121-93. De poco o nada sirvieron los 37 puntos de ‘The Beard’ (6/13 en tiros de dos y 6/13 en tiros de tres).
Harden estuvo además bien defendido por T.J. McConnell y Corey Brewer. Éste último salió como titular para cubrir la baja de Jimmy Butler, que no disputó el partido por unas molestias físicas. Sólo Gerald Green, con 18 puntos, y el debutante Kenneth Faried, con 13, le sirvieron como apoyo válido.
Por parte local se vio de nuevo a un Joel Embiid dominador, con poca competencia en la zona. El camerunés terminó con 32 puntos y 14 rebotes. También volvió a destacar, y cada vez es menos sorprendente, el novato Landry Shamet con 18 puntos en 20 minutos.
El último cuarto fue de aliño. Los Sixers dominaron a placer, fueron sacando ventaja poco a poco y sentenciaron en el tercer periodo, donde además dejaron a los de Mike D’Antoni en sólo 13 tantos.
Para Philly supone no perder ritmo en la lucha por ser cabeza de serie en la Conferencia Este, haciendo de menos la también victoria de los Celtics. Están ya con 31-17. En cambio, los Rockets se descuelgan un poco del cuarto puesto del Oeste y se quedan con 26-20.