El campeón del mundo con EE UU en 2014 será cortado hoy por los Nets y firmará por unos Rockets que necesitan un pívot tras la lesión de Capela.
Kenneth Faried jugará en Houston Rockets, tal y como adelantó Adrian Wojnarowski. El ala-pívot ha llegado a un acuerdo de buyout con los Nets y se desvinculará del equipo de Brooklyn para firmar la próxima semana con los texanos, desesperados por encontrar ayuda interior tras la lesión de Clint Capela, que puede estar de baja hasta seis semanas.
La carrera de Faried ha ido de más a menos, de hecho a muy poco, desde que llegó a los Nuggets con el número 22 del draft de 2011 y formó en el Quinteto Rookie. En 2014 fue campeón del mundo con EE UU en el Mundial de España, después firmó una extensión de cuatro años y 50 millones con los Nuggets (tras una temporada de 13,7 puntos y 8,6 rebotes). Después fue perdiendo protagonismo y en la temporada 2016-17 jugó muy limitado por unos problemas de espalda y perdió su sitio en el actual proyecto de los Nuggets, que aspiran al máximo en el Oeste.
En julio fue traspasado a los Nets en una operación de perfil menor y solo ha jugado 13 partidos en Brooklyn, con menos de 10 minutos de media en pista. Con 29 años, los Rockets creen que pueden usar su capacidad para rebotear y continuar jugadas de pick and roll. Desde luego, tendrá minutos para reinvindarse hasta que regrese Capela.