Los Lakers llegaron al descanso con 18 puntos de ventaja. La lesión de Ball condicionó el partido. El base suma 163 tantos en tres partidos: todos sin asistencia.

Noche de locura Houston. Los Rockets vencieron en la prórroga a los Lakers tras remontar 18 puntos en la segunda parte, empatar en el último segundo con un triple de Eric Gordon y otra noche de récord de James Harden. El base hizo 48 puntos, capturó 8 rebotes, repartió 6 asistencias y robó 4 balones. Es su 19º encuentro seguido con al menos 30 puntos. En la historia solo Wilt Chamberlain tiene una racha más larga. Además, acumula 163 puntos en los últimos tres encuentros (54,3 de media), una hazaña que solo Kobe Bryant y Michael Jordan habían conseguido antes. Y lo ha logrado sin ayuda de sus compañeros: ninguno de esos tantos ha llegado a consecuencia de un pase amigo (ESPN Stats).

Sin LeBron James, que se perdió su 13ª partido consecutivo por una lesión en la ingle(empata el mayor número de encuentros sin jugar de su carrera), ni Rajon Rondo, los Lakers llegaban a Texas llenos de moral después de vencer en Oklahoma. Y ese empuje se notó desde el inicio: 29-36 al acabar el primer cuarto y 46-64 al descanso con un Kyle Kuzma espectacular y unos Rockets desatinados desde el triple: fallaron 25 en 24 minutos. El ala-pívot sumó 20 de sus 32 puntos en el periodo inicial,convirtiéndose en uno de los seis jugadores con esos guarismos en un solo cuarto esta temporada tras Curry, Harden, Lillard, Paul George y Kemba Walker. Desde Kobe Bryant en 2011, nadie en los Lakers había llegado a esa cifra en los doce minutos iniciales de un duelo.

La lesión de Lonzo Ball

Una presentación increíble que parecía suficiente para doblegar a los Rockets, que siguen sin Chris Paul y Clint Capela. Sin embargo, con solo tres minutos de juego del tercer cuarto y 52-67, todo se torció: Lonzo Ball pisó sobre Ennis y se torció el tobillo. El base tuvo que salir del encuentro (las pruebas médicas realizadas descartan una lesión grave) y Luke Walton, tras una intensa protesta a los árbitros por la acción, fue expulsado. «(Las cosas se complicaron) Justo cuando salió Lonzo. Ahí fue exactamente cuando se nos fue. Perdimos un poco el impulso», dijo Brandon Ingram en palabras recogidas por la ESPN.

El alero fue importante durante una prórroga al que se llegó por el empuje de Gordon. El escolta finalizó con 30 puntos y cinco triples, el cuarto a dos segundos del final. «Es un talento ofensivo. Lo hace fácil no solo para mí, sino para todos», dijo Harden, que un día más acudió de forma compulsiva a la línea de tiros libres (15 de las 36 veces que lanzó desde la personal su equipo).

En la prórroga, los Lakers cayeron a los golpes. A pesar de la buena mano de Ingram y la sangre fría de Zubac (otra vez más, genial), Houston se llevó la victoria con la participación exclusiva de Gordon y Harden, y la locura de Caldwell-Pope en un lanzamiento sin sentido y que no tocó ni aro a 23 segundos del final. Entre los dos consiguieron 17 de los 18 tantos de los Rockets, 12 de ellos desde el tiro libre. Esta derrota deja a los Lakers fuera de los puestos de playoffs: ahora mismo son novenos.